Afuera está lloviendo y las gotas golpean con violencia mi ventana
A nadie le importa que esté lloviendo, a finales del verano resulta muy común, así que la gente camina con mucha rapidez y no se detienen a mirar que la violenta lluvia de verano ha ahogado las flores.
Me detengo y puedo ver la lluvia fría y violenta de verano, destruir las pequeñas flores que crecen en la acera de la calle gris y agrietada.
¿Por qué me siento tan marchita a finales del verano?
¿Por qué siento que me ahogo a finales del verano?
Definitivamente, así es el fin de verano. Llega intempestivo el clima a marchitar las flores.
ResponderBorrarQué bueno que vuelvas a publicar, no te ausentes más. Me encantó lo que escribiste.
Un abrazo.
Tal vez no sea el final del verano que te pongas triste.
ResponderBorrarLa tristeza como cualquier sentimiento nos llega por causas inimaginables, tal vez esa lluvia solo sea las lágrimas que desean salir de ti, y dejar fluir esa tristeza.
Un abrazo, con todo cariño.
Por aquí hace tiempo que no llueve y ha hecho mucha calor. El tiempo nos ha dado un respiro y la temperatura hoy es más fresca.
ResponderBorrarUn abrazo.
Los finales, como el del verano... pueden llevar a la tristeza o a la nostalgia por lo vivido... però aún hay flores que, pese a todo, brotan en el lugar más inesperado, son nuestra esperanza para la nueva etapa !.
ResponderBorrarSaludos i buena semana ;)
Tiempo de renovación, llega el verdadero año nuevo quizás?
ResponderBorrarQué bonitas las estrellas que va dejando el cursor en tu blog!
Besitos Daniela, encantada de conocerte